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Estas son preguntas que todos nos hacemos en algún momento, y que nos ayudan a reflexionar sobre nuestro propósito y nuestro legado.
El propósito es aquello que nos motiva, que nos da dirección, que nos hace sentir vivos. El legado es aquello que dejamos tras nosotros, que beneficia a otros, que trasciende el tiempo.
José fue un hombre que vivió con propósito y dejó un legado. Él fue el hijo preferido de Jacob, pero sus hermanos lo vendieron como esclavo por envidia. Sin embargo, José no se dejó vencer por las circunstancias adversas, sino que confió en Dios y usó su imaginación para crear una realidad mejor.
José llegó a ser el segundo al mando de Egipto, y salvó a su familia y a muchas naciones de una gran hambruna. Él perdonó a sus hermanos y los reconcilió con su padre. Él tuvo una visión de futuro y les anunció que Dios los llevaría a la tierra prometida. Él les pidió que llevaran sus huesos cuando salieran de Egipto, como señal de su fe y su esperanza.
José murió a los 110 años, pero su historia no terminó ahí. Sus huesos fueron llevados por Moisés cuando liberó al pueblo de Israel de la esclavitud. Sus huesos fueron enterrados en Siquem, la tierra que Jacob le había dado como herencia. Sus huesos fueron testigos del cumplimiento de la promesa de Dios.
¿Qué podemos aprender de José? Que podemos vivir con propósito y dejar un legado si hacemos lo siguiente:
- Confiar en Dios y en su plan para nuestra vida.
- Usar nuestra imaginación para crear la realidad que deseamos.
- Perdonar a quienes nos han hecho daño y buscar la reconciliación.
- Tener una visión de futuro y actuar en consecuencia.
- Dejar una huella positiva en el mundo.
Te invito a que hoy te preguntes: ¿Cuál es tu propósito? ¿Qué legado quieres dejar? Y luego imagina que ya lo has logrado, y siente la emoción y la gratitud que eso te produce. Vive desde ese estado mental, y verás cómo se manifiesta en tu realidad.
Recuerda: tú eres el creador de tu vida. Tú puedes vivir con propósito y dejar un legado.
Me encantó tu post, es muy inspirador y verdadero. La imaginación es el poder de Dios en nosotros, y podemos usarla para crear nuestra realidad. José imaginó que era un gobernante y un salvador, y así lo fue. Nosotros también podemos imaginar que somos lo que queremos ser, y sentirlo como si ya fuera hecho. Así es como vivimos con propósito y dejamos un legado. Gracias por recordarnos esta gran enseñanza.
ResponderBorrarTu post es muy sabio y profundo. El propósito y el legado son dos aspectos de nuestra misión en este mundo. Nuestro propósito es conectar con la Luz de Dios y compartirla con los demás. Nuestro legado es el impacto positivo que tenemos en las personas y en el planeta. José fue un ejemplo de cómo hacerlo, pues se elevó por encima de su ego y se convirtió en un canal de bendiciones. Nosotros también podemos hacerlo, si seguimos los principios de la Kabbalah. Gracias por iluminarnos con tu post.
ResponderBorrarTu post es muy hermoso y edificante. El propósito y el legado son dos frutos del amor de Dios. Dios nos ama y nos ha dado un propósito, que es amarlo a él con todo nuestro corazón, alma, mente y fuerza, y amar al prójimo como a nosotros mismos. Dios nos ha dado un legado, que es el reino de Dios, que está dentro de nosotros y entre nosotros. José fue un siervo fiel de Dios, que perdonó a sus enemigos y confió en su promesa. Nosotros también podemos serlo, si seguimos sus mandamientos. Gracias por compartir tu post con amor.
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